La preocupación de la sociedad por el medio ambiente y el desarrollo tecnológico han potenciado, lo que se denomina, las Tecnologías Limpias.
Este tipo de tecnologías son aquellas que al ser aplicadas no producen ningún efecto secundario, ni ninguna transformación al equilibrio medio ambiental. Es decir, se basan en la sostenibilidad y abarcan aquellas que prácticamente no contaminan y que utilizan principalmente recursos naturales y renovables como la aerotermia, geotermia e hidrotermia.
Teniendo en cuenta que la Bomba de Calor utiliza energía procedente de fuentes renovables y naturales, se la puede considerar una Tecnología Limpia, como así lo avalan múltiples organismos europeos y mundiales.
Entre los objetivos más destacados de las citadas tecnologías cabe resaltar:
- Reducción de las emisiones de CO2, obteniendo un balance medioambiental más limpio.
- Reducción del consumo de combustibles fósiles, tendentes a las políticas de descarbonización de la UE.
- Reducción del consumo de energía primaria.
- Utilización de energía procedente de fuentes renovables.
Obviamente estas tecnologías que utilizan las denominadas energías limpias, según la Comisión Europea, están cambiando los mercados mundiales de la energía. Motivo por el cual el citado organismo ha presentado un paquete de medidas para preservar la competitividad de la Unión Europea.
Las propuestas de la Comisión, bajo el lema “Energía limpia para todos los europeos”, tienen por objeto demostrar que la transición hacia, la mencionada, energía limpia es el futuro. Las propuestas legislativas del citado paquete abarcan la eficiencia energética, las energías renovables, el diseño del mercado de la electricidad, la seguridad del abastecimiento de electricidad y las normas de gobernanza de la Unión de la Energía. La Comisión propone además nuevas acciones en el horizonte del diseño ecológico y una estrategia para una movilidad conectada y automatizada.
El paquete también incluye medidas para acelerar la innovación en materia de energías limpias y para renovar los edificios de Europa. Asimismo presenta medidas para fomentar la inversión pública y privada, promover la competitividad industrial de la UE y mitigar el impacto social de la transición hacia una energía limpia.
